miércoles, 22 de junio de 2011
¡Echa la simiente!
El surco está abierto, y tu suave hondor
Bajo el sol semeja una cuna ardiente
¡Oh, labriego, tu obra es grata al Señor!
¡Echa la simiente!
Nunca, nunca, el hambre negro segador
A tu hogar se llegue solapadamente.
Para que haya pan, para que haya amor,
¡Echa la simiente!
La vida conduce, rudo sembrador,
Canta himnos donde la esperanza aliente.
Burla la miseria y burla al dolor,
¡Echa la simiente!
Gabriela Mistral
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Faltó el último verso:
ResponderEliminar"El sol te bendice, y acariciador
en los vientos Dios te bate la frente.
Hombre que voleas trigo volador:
¡prospere tu rubia simiente!
Hay además un error. NO es "La vida conduce," sino "La vida conduces,"
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